Más territorio, menos escritorio – reflexiones conversación con financiadores

Felipe Bogotá, Executive Director, TerritoriA

Una de las razones por las cuales nace TerritoriA es para poder ayudar a entender aquellas necesidades del ecosistema para plantear nuevas formas de hacerlo y algo que siempre ha estado en nuestra mente es cómo contribuir a transformar la manera en que se ha financiado el desarrollo. Por esto, decidimos convocar a actores que trabajan desde el financiamiento para generar cambios sociales bajo la siguiente pregunta ¿Deberíamos cambiar la forma en la que se financia hoy el desarrollo? Esto sucedió el 8 de noviembre de 2023, en el marco del “Road to Bogotá” antes del #ShiftThePower Global Summit.

Creemos firmemente en el poder de las ideas y de las experiencias de todos aquellos que se han atrevido a proponer nuevas formas, por ésto, provocamos a actores muy relevantes para América Latina a conversar, a retar el presente y a plantear desde sus experiencias, cómo debería cambiar este sistema Estas son las reflexiones que surgieron:

• Deben suceder cambios  en el sistema que adjudica fondos: Se encuentran diferentes retos  en el marco bajo el cual se asignan recursos. Aspectos como los esquemas de contratación, los términos de adjudicación y ejecución y poca conversación con el territorio sobre la mejor destinación de recursos. Igualmente, este sistema genera desigualdades e incentivos ineficientes para los actores que perciben los fondos. Por ejemplo, las organizaciones de la sociedad civil de menor tamaño se enfrentan a barreras complejas o la alta oferta de adjudicación de fondos a proyectos, desincentiva otro tipo de formas de innovadoras de ejecutar fondos disponibles. @innpactia
• Innovar y atreverse: Las experiencias compartidas por los participantes reveló que no existen apuestas seguras que garanticen el éxito. Se propone que los actores de financiamiento podrían encontrar en el “asumir riesgos” una oportunidad de innovación y de encontrar fórmulas replicables a sus sus formas tradicionales de financiar, de tal manera que la experiencia misma arroje elementos de aprendizaje para futuros mecanismos. Colombia es un país con un incremento de vehículos innovadores de financiamiento; esto plantea un contexto propicio para proponer formas disruptivas. Experiencias como los Bonos de Impacto Social @sibbsco han demostrado que atreverse a innovar puede apalancar grandes transformaciones y contagiar a otros actores a pensarse de forma distinta el financiamiento. Y que se necesita más creatividad e innovación que traigan soluciones sobre la mesa que fomenten que más recursos lleguen efectivamente a dónde más se necesitan.
• Construir puentes para dinamizar el ecosistema: Mejorar el actual sistema de financiamiento requiere un trabajo colaborativo en el que se construyan puentes entre los actores que financian y aquellos que reciben financiamiento. Se plantearon ideas como generar proyectos con algún nivel de riesgo que permita innovar, posicionar actores claves que contagien a otros a sumarse, probar proyectos símbolos que tengan perspectiva de escalabilidad y experimentar en conjunto para generar aprendizaje colectivo. El trabajo realizado por @fhi360 en este campo es una referencia para seguir dinamizando el ecosistema y en lo que seguiremos contribuyendo como TerritoriA para crear más entornos habilitantes que conecten ideas, procesos con los recursos necesarios para mejorar los territorios.
• Las capacidades locales como base para catalizar la filantropía: Diferentes experiencias evidencian que es necesario seguir transitando un camino de valorar y catalizar las capacidades con las que cuentan los actores locales. No solo capacidades tangibles como las técnicas, patrimonio o posicionamiento, sino se requiere seguir impulsando un cambio de mentalidad hacia grandes ideas de transformación y tejer la confianza para apostarle a soluciones colectivas de alto impacto. En este sentido, labores como la realizada por las Fundaciones Empresariales @alpina impulsado por la AFE han sido claves en mostrar cómo el trabajo directo con las comunidades locales llevan a una filantropía más estratégica. Esto implica que también debemos valorar otros recursos que no son financieros y que son la base de construir otros futuros posibles, como lo son el tiempo, las ideas, las contribuciones en especie. Es aquí en donde está el potencial de convertir a las comunidades en inversionistas de su propio desarrollo.
• Localización de los recursos: Sigue siendo una tarea pendiente una efectiva localización de los recursos disponibles para el desarrollo. El proceso existente sigue dejando recursos en el camino entre diferentes instancias y actores que no permiten localizar toda la abundancia de fondos. Esto, no solo va en detrimento de financiar efectivamente problemáticas locales sino en inhibir el potencial que tienen los actores locales para generar soluciones  y fortalecerse de cara a nuevos procesos. Esto, es un trabajo propio de @territoria y @azai que busca territorializar el impacto en las comunidades con una gestión eficiente del impacto. Creemos además que necesitamos soñar en grande para poder atraer los recursos que efectivamente se necesitan para resolver los retos de nuestro país y de la región. Una mentalidad de abundancia, de generación de confianza y de fortalecimiento del ecosistema, lograría que los recursos locales se implementaran de maneras más adecuadas, pertinentes e involucrando SIEMRPE a las comunidades en los procesos de toma de decisiones.

Estas conversaciones nos están diciendo verdades evidentes de cambios necesarios para poder lograr que los retos que tenemos como país y como región se logren gestionar, asignar, evaluar, compartir de maneras distintas. Así que convocamos a todos aquellos que quieran seguir la conversación a que convirtamos esto en hojas de ruta colectivas que contribuyan al ecosistema y fortalezcan nuestros territorios.

Por: Felipe Bogotá, Executive Director, TerritoriA